Para todo joven, o para la inmensa mayoría de ellos – e incluso para su familia- ingresar en la Universidad representa una aspiración muy importante, una meta ambiciosa que no todos logran alcanzar que requiere grandes esfuerzos, al tiempo que proporciona emociones, alegrías, cambios en los hábitos de estudio, en fin…
Para enfrentar estos cambios con éxito el joven debe revisar el método de estudio que hasta ahora ha empleado, para lo cual existe un compendio de materiales elaborado por las MSc licenciada María Julia Becerra Alonso e ingeniera Annia La O Thaureaux, del Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría, titulado Habilidades básicas para el aprendizaje en la Educación Superior, el cual tiene el propósito de ayudarte en ese empeño.
El estudio de este documento debe permitirle al educando desarrollar habilidades en todo lo concerniente a organizar y planificar su tiempo de estudio, determinar lo esencial en un contenido, leer con rapidez y profundidad, comunicarse con eficiencia y evaluar su desempeño como estudiante.
Estas habilidades son exigencias permanentes para el aprendizaje, pues el cúmulo de tareas que realiza el estudiante universitario deberá articularlas adecuadamente con sus estudios en la especialidad de que se trate. Sólo si se organiza el tiempo y se planifican las jornadas, se podrá realizar cada tarea con eficiencia, de lo contrario lo sorprenderán siempre las evaluaciones, se le acumularán las actividades y se sentirá agobiado y tenso.
La actividad intelectual implica saber determinar aquellos contenidos esenciales que le permitan avanzar en el aprendizaje, buscando, sobre todo, un método para aprender a aprender y obviar aquellos contenidos que son complementarios y no resultan indispensables.
Durante su formación profesional, el joven tendrá que leer extensos materiales: libros, artículos, textos en general, con diferentes niveles de complejidad, indispensables para su preparación y es muy probable que tenga ya formado un hábito de lectura, solo que ahora necesitará desarrollar la habilidad de leer rápido y de manera profunda.
Como futuro profesional debes saber comunicarte, en el más amplio sentido. Tanto con el desarrollo de habilidades comunicativas que te permitan una relación interpersonal adecuada, como mediante el uso de los recursos que ofrecen las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones.
Junto a estas habilidades el estudiante debe saber evaluar sus cualidades para la actividad de estudio, de manera que corrija sus dificultades y potencie sus zonas de éxito.