Aun cuando en Cuba, y en particular, en Las Tunas, no se reporta ni un solo caso de influenza porcina, las direcciones de Salud e Higiene y Epidemiología, conjuntamente con la Defensa Civil y otros organismos y organizaciones en la provincia, adoptan las medidas pertinentes para enfrentar una eventual aparición de esa enfermedad en el territorio.
En tal sentido, se han activado las estructuras de dirección de Salud en cada uno de los municipios, y en la provincia, con el objetivo de coordinar acciones acerca de la conducta por seguir ante cada caso que se pueda presentar y crear las condiciones hospitalarias que permitan ingresar a los pacientes que lo requieran, de ser infectados con el virus.
La influenza porcina (gripe porcina) es una enfermedad respiratoria de los cerdos causada por el virus de la influenza tipo A, que puede transmitirse directamente de estos a las personas, fundamentalmente a aquellas que están en contacto directo con estos animales.
La transmisión de la influenza porcina de persona a persona también puede ocurrir, aunque pueden infectarse al tocar algo que tenga el virus y luego llevarse las manos a la boca o la nariz.
Los síntomas de esta enfermedad son similares a los de la gripe clásica y se presentan, generalmente, con fiebre alta de aparición brusca, dolor de cabeza intenso, secreción nasal, irritación de los ojos, letargo, falta de apetito, tos y en algunos casos, náuseas y vómitos. Al igual que en otras enfermedades respiratorias, el contagio se produce de persona a persona, al hablar, toser o estornudar, o por el contagio directo de microgotas infectadas con el virus.
En la actualidad, se conocen cuatro subtipos principales del virus de la influenza tipo A aislados de cerdos: H1N1, H1N2, H3N2 y H3N1, aunque, la mayoría de los virus aislados recientemente han sido los virus H1N1.
La aglomeración de personas en espacios cerrados favorece la dispersión del virus de la influenza, afección que puede tener de una a dos semanas de incubación, según refieren especialistas de la Salud.
La Salud en la provincia cuenta con las posibilidades diagnósticas y de tratamiento para este nuevo virus de la influenza, además de los médicos, enfermeras y técnicos necesarios para enfrentar su aparición en la red de policlínicos, hospitales y consultorios del Médico y la Enfermera de la Familia, entre otras instituciones.
La población debe extremar la higiene personal y colectiva, taparse la boca y nariz al estornudar o toser, el lavado frecuente de las manos, la limpieza en las viviendas y centros colectivos, así como la atención médica oportuna cuando sea necesario. Las medidas sanitarias establecidas deben ser cumplidas por todos los organismos y la población en general con el rigor y la disciplina que caracteriza a nuestro pueblo.
En la reunión de coordinación, efectuada aquí para la toma de decisiones en torno a la posible aparición de casos de influenza, Teresa Amarelle Boué, primera secretaria del Partido en Las Tunas, indicó a los factores implicados en la tarea, la adopción de cuantas medidas sean necesarias para contrarrestar un posible brote de la enfermedad en el territorio.