Thursday, April 30, 2009

Exitosa inmunización contra la poliomielitis


Cuando todavía restan algunos días para culminar la XLVIII Campaña Nacional de Vacunación Antipoliomielítica, los resultados obtenidos por la provincia hasta la fecha, sobrepasan el 95 por ciento de niños inmunizados contra esa enfermedad en la segunda etapa.

En la consecución de este propósito ha sido determinante el protagónico papel desempeñado por el médico y la enfermera de la familia en cada una de las áreas de salud, en las que no ha faltado el aporte decisivo de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR).

Los especialistas que atienden el Programa de Vacunación en el Centro Provincial de Higiene y Epidemiología, aseguran que este resultado es consecuencia también de la confianza que les inspira a la familia este programa de la Salud Pública cubana contra esta y otras enfermedades prevenibles.

Los niños cubanos reciben cada año, gratuitamente, 11 vacunas que los protegen contra 13 enfermedades, entre las que se cuentan la poliomielitis, difteria, tétanos, tos ferina, sarampión, rubéola, parotiditis, hepatitis B, haemophilus influenzae, fiebre tifoidea, formas graves y diseminadas de la tuberculosis y la antimeningocóccica B y C.

Antes de 1959 solo se había eliminado en Cuba una sola de las enfermedades prevenibles por vacuna, la viruela en 1921, mientras que en la etapa comprendida entre los años 1962 y 2007 suman cinco las desaparecidas: poliomielitis (1962), difteria (1979), sarampión (1993), rubéola y tosferina (1994).

A los anteriores resultados se añaden la eliminación del tétanos neonatal en 1972 y de otras dos complicaciones graves, el síndrome de rubéola congénita y la meningoencefalitis postparotiditis en 1989, mientras se reduce a menos del 94 por ciento la morbilidad en la enfermedad meningocóccica, la fiebre tifoidea y la hepatitis B.

Otro ejemplo del esfuerzo realizado en la prevención de enfermedades, lo constituye el hecho de que en el período comprendido entre los años 1962 y 2008 se han aplicado en el país más de 75 millones de dosis de vacuna contra la poliomielitis, con lo cual se ha logrado proteger contra esa enfermedad a la población cubana menor de 60 años.

Hipertensión Arterial


Prevenirla desde la niñez
Foto: Ernesto Peña Leyva
La hipertensión arterial esencial en las personas adultas comienza desde la niñez, etapa de la vida en la que resulta más fácil desarrollar estilos de vida saludables dirigidos a prevenir esta enfermedad. Sucede, sin embargo, que no siempre actuamos en correspondencia con esa prerrogativa y al final sufrimos las consecuencias.
Consideran los especialistas que lo mejor, y más eficaz, es la creación de hábitos alimentarios adecuados desde los primeros años de vida, por encima de cualquier tratamiento médico que pueda aplicarse para controlarla una vez establecida como un problema de salud.
Especialistas en esta dolencia conceden gran importancia a la necesidad de hacer del acto de tomarse la presión arterial una práctica rutinaria en los niños, por lo menos, a partir de los 3 años, edad en la que se incrementa su cooperación y puede realizárseles siempre que se tenga al alcance un brazalete adecuado.
Actuar sobre los factores de riesgo para establecer el diagnóstico temprano y la identificación y modificación del estilo de vida (tratamiento no farmacológico) que incluye un asesoramiento dietético (reducción de sal, azúcares y grasas saturadas, así como un aumento en el consumo de frutas y vegetales), resulta vital para garantizar el control y evitar complicaciones.
La reducción del peso corporal, el tabaquismo activo y pasivo, la prescripción de actividades físicas para evitar el sedentarismo, el control del estrés, eliminar o disminuir la ingestión de bebidas alcohólicas y el logro de una adecuada educación nutricional, asentada sobre la base de una dieta con equilibrio energético y micronutrientes que favorecen la salud, son fundamentales.
Una vez diagnosticada la enfermedad, el especialista emite las indicaciones correspondientes para mantener la presión arterial en los límites permisibles. Siempre es bueno saber que los medicamentos tienen el inconveniente de que pueden presentar reacciones adversas, por lo que su uso queda reservado para aquellos pacientes que no respondan al procedimiento no farmacológico, presenten una presión arterial consistentemente alta, en cuyo caso en el tratamiento han de tenerse en cuenta otros factores de riesgo asociados o antecedentes familiares de alguna enfermedad cardiovascular.
La adecuada percepción del riesgo que significa padecer de hipertensión arterial, obliga a desarrollar una estrategia de promoción de salud dirigida a disminuir la presión arterial media de la población, aunque los entendidos en la materia insisten en que la prevención sigue siendo la medida sanitaria más importante, universal y menos costosa.

Medidas para prevenir influenza porcina

Aun cuando en Cuba, y en particular, en Las Tunas, no se reporta ni un solo caso de influenza porcina, las direcciones de Salud e Higiene y Epidemiología, conjuntamente con la Defensa Civil y otros organismos y organizaciones en la provincia, adoptan las medidas pertinentes para enfrentar una eventual aparición de esa enfermedad en el territorio.
En tal sentido, se han activado las estructuras de dirección de Salud en cada uno de los municipios, y en la provincia, con el objetivo de coordinar acciones acerca de la conducta por seguir ante cada caso que se pueda presentar y crear las condiciones hospitalarias que permitan ingresar a los pacientes que lo requieran, de ser infectados con el virus.
La influenza porcina (gripe porcina) es una enfermedad respiratoria de los cerdos causada por el virus de la influenza tipo A, que puede transmitirse directamente de estos a las personas, fundamentalmente a aquellas que están en contacto directo con estos animales.
La transmisión de la influenza porcina de persona a persona también puede ocurrir, aunque pueden infectarse al tocar algo que tenga el virus y luego llevarse las manos a la boca o la nariz.
Los síntomas de esta enfermedad son similares a los de la gripe clásica y se presentan, generalmente, con fiebre alta de aparición brusca, dolor de cabeza intenso, secreción nasal, irritación de los ojos, letargo, falta de apetito, tos y en algunos casos, náuseas y vómitos. Al igual que en otras enfermedades respiratorias, el contagio se produce de persona a persona, al hablar, toser o estornudar, o por el contagio directo de microgotas infectadas con el virus.
En la actualidad, se conocen cuatro subtipos principales del virus de la influenza tipo A aislados de cerdos: H1N1, H1N2, H3N2 y H3N1, aunque, la mayoría de los virus aislados recientemente han sido los virus H1N1.
La aglomeración de personas en espacios cerrados favorece la dispersión del virus de la influenza, afección que puede tener de una a dos semanas de incubación, según refieren especialistas de la Salud.
La Salud en la provincia cuenta con las posibilidades diagnósticas y de tratamiento para este nuevo virus de la influenza, además de los médicos, enfermeras y técnicos necesarios para enfrentar su aparición en la red de policlínicos, hospitales y consultorios del Médico y la Enfermera de la Familia, entre otras instituciones.
La población debe extremar la higiene personal y colectiva, taparse la boca y nariz al estornudar o toser, el lavado frecuente de las manos, la limpieza en las viviendas y centros colectivos, así como la atención médica oportuna cuando sea necesario. Las medidas sanitarias establecidas deben ser cumplidas por todos los organismos y la población en general con el rigor y la disciplina que caracteriza a nuestro pueblo.
En la reunión de coordinación, efectuada aquí para la toma de decisiones en torno a la posible aparición de casos de influenza, Teresa Amarelle Boué, primera secretaria del Partido en Las Tunas, indicó a los factores implicados en la tarea, la adopción de cuantas medidas sean necesarias para contrarrestar un posible brote de la enfermedad en el territorio.